Era un día normal como cualquiera
entonces fue cuando él apareció y en ese momento ella llegó a considerar su
hola tan simple como cualquier otro, sin importancia, de esos que vienen y se
van junto con el viento. Aquel no era más que el comienzo de una historia que
jamás terminaría…o por lo menos hasta que el tiempo lo decida…
Y así pasaron los días y sin darse cuenta poco
a poco ella pudo descubrir su forma de ser, su forma de pensar, sus gustos.
Pese a la distancia el siempre estaba ahí para sacarle una sonrisa, cosa que
últimamente muy pocas personas lo podían lograr, era capaz de hacerla reír con
una palabra y podía lograr que deje sus preocupaciones de lado.
Pero ella siempre
tenía el mismo pensamiento, pensaba que lo molestaba pero no podía evitarlo, sin
darse cuenta se había acostumbrado a esas charlas sin sentido, a que la haga
reír, a que la pelee y a todo eso….
Pasaban los días, las noches y
ella tenia esa idea fija en la cabeza, pensaba que era casi imposible estar con el… Pero
también pensaba que lo imposible tardaba un poco más ¿Será así?- Se preguntaba-
Pasé lo que pasé ella se conformaba con ver su hermosa sonrisa sólo en fotos… Ok, me perdí en su NO
SE QUE y ahora estoy escribiendo esta incomprensible y absurda historia por su culpa. Lo odio pero me gusta de una
manera irreversible, no hay vuelta atrás. Sigo insistiendo no tiene nada en
especial solo que me acostumbro a su forma de ser, le tome cariño y creo que si
lo molesto tanto es porque a veces logra que lo extrañe.